domingo, 9 de diciembre de 2012

"La Condicion Humana" por Beby.


La Condición Humana.

Mucho se ha hablado y escrito de la crisis económica que pertinazmente azota al mundo, según se dice desde el año 2007, iniciada al parecer con la desintegración de la burbuja inmobilaria de Los Estados Unidos y la quiebra del banco Lehman Brothers. Se culpa a los grandes intereses económicos, los inversores avariciosos; a los políticos, tildados de doblegados a esos intereses económicos, además de corruptos, y de ineficientes. Algunos han llegado a culpar de iniquidad al sistema socio-económico que impera en el mundo actual: la democracia y la libre empresa.

Este galimatías es entreverado: algo de objetividad y mucho de ignorancia. Los grandes intereses económicos son avariciosos por naturaleza puesto que su propósito es ganar la mayor cantidad de dinero posible en cualquier forma disponible. De lo que menos se les puede acusar es de ser avariciosos. Más veces que lo que desean sus clientes acuden a triquiñuelas legales, a técnicas diseñadas para confundir, y hasta a la comisión de estafas, fraudes y otras formas delictivas. No es menos cierto que ejecutando sus actividades, estos grandes intereses económicos no le ponen una pistola en la cabeza a aquellos que quieren participar en sus negocios, sean inversores mayoritarios, personas que quieran mejorar sus vidas, o dirigentes políticos y de organizaciones no gubernamentales. Si tomamos la avaricia como un concepto, todos esos grupos son tan avariciosos como los grandes intereses económicos. Los primeros por su avaricia en ganar dinero de forma aparentemente fácil. Los otros por la ambición de mejorar su vida a como de lugar. Actualmente, debido a la crisis económica mundial, estos grupos terminan endeudados hasta las cejas, defraudados, desorientados y desesperanzados. Y corruptos hasta la médula de sus huesos. Uno de los resultados de este endeudamiento masivo es el incremento en un 30% de los suicidios en el año 2011.

Beby.

                                                                                                                                           (continuará)

5 comentarios:

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo con todo lo que dices, pero resulta que los llamados grandes intereses, son el grupo de mayor poder y sin realizar digamos ningun "trabajo util" se apoderan cada ves de mas riqueza, dejando al resto cada ves mas pobre. De manera, que anque quieras dar a entender, que la avaricia forma parte de la condicion humana, es logico, que la mayoria de los "perdedores" a los que pertenecemos, no quede conforme, con que a pesar de realizar un mayor esfuerzo, seamos quienes quedamos peor parados, no crees?

Unknown dijo...

Muchas gracias por tu intervención, y me parece una reflexión muy razonable y de sentido común. La polémica está servida e informaré al autor, un gran amigo.
Pronto comentará algo sobre tu punto de vista.

Unknown dijo...

Señorita Odalis Sanchez:
Lo que se publicó en el blog de Andy es el inicio de una idea que quería desarrollar y que desarrollaré de todas formas, pero antes de continuar con la misma, debo responder a varias personas que han hecho comentarios al respecto.

¿Cómo se apoderan los poderosos intereses económicos cada vez más de riquezas? Porque de distintas formas le sacan el dinero del bolsillo al resto de las personas. ¿Por qué el resto se queda cada vez más pobre? Porque invierten su dinero en las distintas formas que los poderosos intereses económicos les presentan.

Para no agobiarte, un simple ejemplo: ¿Cuántas personas que tú conozcas refinanciaron sus hipotecas en cuanto los bancos abrieron el banderín? ¿Les hacía falta a todas esas personas ese dinero extra? Sin embargo, borraron de un tirón todo el dinero que habían pagado, además de pagar ciertas tasas por el procedimiento y prolongar el pago de la hipoteca. De esto es lo que se trata mi idea. De cómo todos somos culpables, en mayor o menor grado de lo que nos sucede, a pesar de que nos cueste reconocerlo.

Seguiremos en contacto. Felices Pascuas y Ano Nuevo.

Beby.

Odalis dijo...

Pues tiene razón, el pobre casi siempre peca de ignorante, ...pero cuando un carro, "choca" con un transeúnte, aun cuando ambos tengan parte de culpa, es de sentido común exigirle al del carro que como mínimo pague las cuentas medicas del accidentado, y a este nadie se le ocurre cobrarle una posible abolladura en el carro, de hecho, se dice que el carro atropello, al transeúnte, no que tuvieron una colisión. Porque aunque técnicamente los dos chocaron, no hay comparación entre quien va en un carro y quien va a pie. Esto mismo creo debiera aplicarse a este otro ejemplo, la comparación entre los poderosos y el ciudadano común, es muy desigual, y creo que como tal debiera juzgarse. Claro que a nadie lo obligan a pedir un préstamo en el banco, como nadie obliga al transeúnte a cruzar la calle, ni nadie obligo a la abuela de la caperucita, a que le abriera la puerta al lobo.

Unknown dijo...


Señorita Odalis:
Tu ejemplo del auto es válido solo cuando el chofer tiene la culpa. Si el peatón es el culpable, entonces nada le pasa al chofer, aún cuando el peatón muera.
No trato de igualar al pobre con el rico. No se trata de eso. La Condición Humana es la suma de todos los aspectos de un humano, desde sus genes, pasando por sus instintos de animal que es, para terminar en la morfología.
Tal vez hice mal empezando por la avaricia. Así que trataré de enmendarme. Empezaré por decir que la culpa de nuestra situación económica es de todos, de los ricos pero también de los pobres. ¿Por qué? Porque todos los humanos, absolutamente todos, tienen el instinto heredado desde hace milenios de intentar vivir mejor, de satisfacer sus necesidades lo mejor que se pueda. De eso escribiré la próxima vez.
Una digresión: estoy de acuerdo en que si queremos cambiar a Cuba, lo cual veo extremadamente difícil, es necesario convencer al isleño, como dice tu blog.
Saludos, Beby.